En cualquier ciudad, en cualquier país, ve a
cualquier institución de salud mental o centro de rehabilitación al que tengas
acceso. Estando en la recepción, pide reunirte con aquel que se hace llamar «El
Portador del Pasado». En la última silaba de tu oración, los ojos del encargado
se abrirán de par en par y te mirará como si quisiera ver el alma que está más
allá de tu piel. No hagas ninguna pregunta, porque no te hablará. Te llevará a
un corredor largo y caminará contigo. Mantén tu vista al frente todo el tiempo,
sin miras al piso, paredes o techo.
Después de exactamente trecientos cincuenta
pasos, el empleado se detendrá, se dará vuelta y sacará un reloj de su
bolsillo. Retrocederá la manilla una hora, y desde este punto tendrás una hora
para completar tu búsqueda. Las luces se irán por exactamente tres segundos, y
entonces volverán; estarás en un cuarto sin puertas y con una luz rojiza con la
forma de un pentagrama. Esto proyectará una estrella de rojo sangre en medio
del cuarto, en el que habrá una mesa de comedor desgastada con dos sillas.
Siéntate en la silla más cerca de ti. Mira hacia arriba, mira hacia abajo de
nuevo y un hombre de cabello negro largo y sucio estará boca abajo sobre la
mesa. Responderá a una pregunta: «¿En dónde se situó Él aquella vez?».
El hombre hablará de un lugar que no existe
en ningún mapa, pero describirá el cuarto minuciosamente. Presta mucha
atención, él enumerará exactamente cuántos objetos horribles cuelgan de lanzas
que sobresalen de las paredes. Tienes el resto de la hora para encontrar el
cuarto y sentarte en Su trono. Si fallas, te sugiero que te armes, en grande.
Su trono es el Objeto 15 de 538. Si son
juntados de nuevo, puede que Él regrese una vez más.